El perfil topográfico - representación gráfica de una sección vertical del relieve - será utilizado para hacer los cortes geológicos. Un método práctico para hacer los cortes topográficos es hacer coincidir el extremo de una hoja o tira de papel con la dirección en la cual se quiere construir el perfil topográfico.
A continuación se marcan los puntos donde el papel intercepta curvas de nivel, anotando su valor. Conviene comprobar que todos los puntos que se han marcado corresponden a una serie de números equidistantes y ordenado de modo ascendente o descendente. Si hay dos valores iguales hay un cambio de vertiente (una montaña, tálweg de un río, valle o depresión).
Este método permite construir el perfil en un sistema de ejes. Antes se tendrá que decidir a qué escala se quiere hacer. En geología, los perfiles topográficos tienen la misma escala tanto en el eje vertical como en el eje horizontal. Los puntos del eje horizontal se pueden obtener trasladando a una tira de papel los puntos donde las curvas de nivel interceptan la línea de corte. En el eje vertical se marcaran las altitudes de cada uno de estos puntos de acuerdo con las anotaciones cogidas y teniendo en cuenta el número de milímetros que corresponden a cada punto, según la escala del mapa. Por ejemplo, si la escala del mapa es 1:25.000 y la equidistancia es de 100, la separación entre dos curvas de nivel consecutivas sobre el eje vertical será de 4 mm.
Para resaltar más un relieve o suavizarlo, se puede aumentar o bien disminuir, respectivamente, la escala del eje vertical. Es el sistema que se usa para visualizar los puertos de montaña del recorrido de una carrera ciclista.
Muchas veces interesa conocer la inclinación de la superficie de un relieve con el fin de planificar su uso agrícola, para calcular su grado de erosionabilidad o para prevenir inestabilidades gravitacionales. Otras veces lo que interesa es conocer la pendiente de un curso de agua. La pendiente corresponde a la tangente trigonométrica del ángulo de inclinación de la corriente respecto al plano horizontal. Esto quiere decir que un recorrido, medido sobre el mapa, de 100 metros nos permite salvar un desnivel de 10 metros.
Para calcular la pendiente existente entre los puntos DE de la figura adjunta se tiene que conocer la distancia entre los dos puntos y la diferencia de alturas.
En este caso la cota del punto D es de 52 metros sobre el nivel del mar y la del punto E es de 0 metros (línea de costa). La distancia que los separa es de 75 metros, por lo tanto, la pendiente (cociente que resulta de dividir la diferencia de nivel que hay entre dos puntos por la distancia que los separa) será del 69%. También se puede decir que esta vertiente tiene un ángulo de 34º respecto a la horizontal. Si se repiten estos cálculos para los puntos C y D se verá que la pendiente es más suave en esta dirección (recorrido horizontal mayor para salvar el mismo desnivel). Una vez más se puede comprobar que las curvas de nivel entre los puntos C y D están más separadas que entre los puntos D y E.
Si previamente se ha realizado el corte topográfico utilizando la misma escala para el eje horizontal y el vertical se obtiene una manera gráfica de visualizar esta pendiente.